El lanzamiento de esta investigación, acogida con gran interés en sector, tuvo lugar a finales del pasado mes de septiembre y su desarrollo tendrá una duración de dos años. Además de
Poligras y el IBV (socio coordinador), la nómina de integrantes del consorcio del proyecto se completa con la participación de la Fundación Comunidad Valenciana - Región Europea (FCVRE) como socio de difusión, Acteco Products and Services, la firma portuguesa Empresa Nacional de Reciclagem de Pneus LDA (Recipneu) y el laboratorio holandés ISA Sports.
Ecoturf pondrá en marcha un servicio de gestión integral del ciclo de vida del césped artificial basado en la optimización de las operaciones de mantenimiento y la reutilización de residuos tras la retirada de un campo, todo ello a través de sistemas eficientes tanto desde el punto de vista ecológico como económico. El proyecto llevará a cabo la adaptación del proceso actual de separación de materiales retirados, para que pueda realizarse in situ con equipos móviles de mantenimiento, permitiendo así su reutilización en nuevas instalaciones. Con este fin, se diseñará un nuevo prototipo de máquina para separar fibra, el caucho y la arena.
Por otra parte, la investigación incidirá en la mejora del mantenimiento de los campos. Para ello, se establecerá un servicio basado en una aplicación web que proporcionará a los gestores de estas instalaciones deportivas la información necesaria para la conservación del césped sintético en condiciones óptimas, prolongando así su vida útil y reduciendo el riesgo de lesión de los jugadores durante su uso.
Los beneficios medioambientales de este nuevo proceso incluyen la reutilización del caucho y demás materiales de relleno (arena), el reciclado de los materiales que componen la moqueta, una reducción del 80% del total de residuos que actualmente se llevan a los vertederos y el ahorro de 1.000 litros de combustible fósil por cada campo retirado. En definitiva,
Ecoturf desarrollará técnicas para prolongar la vida útil del césped sintético a fin de reducir las toneladas de desechos que implica el recambio de estas superficies. El objetivo general es reducir el impacto medioambiental que el césped artificial provoca en el momento de su retirada.
Con la aplicación de técnicas de recuperación y reciclaje, los materiales que componen el césped artificial no sólo pueden adquirir una "nueva vida" sino que también suponen un interesante valor económico. Así, por un lado, la arena de las superficies que han quedado obsoletas puede servir para la instalación de nuevos campos, mientras que el caucho y la fibra sintética puede reciclarse y destinarse a la fabricación de césped artificial decorativo o de otros productos como mobiliario urbano.
Un 20% más de vida El césped artificial sigue ganando terreno día a día en el mundo del fútbol. La menor cantidad de agua que requieren estos campos, el reducido mantenimiento y el mayor número de horas de explotación respecto a la hierba natural son las grandes ventajas que ofrece esta superficie, que crece a un ritmo de aproximadamente 400 instalaciones al año en España. Sin embargo, para hacer efectivas estas cualidades no se deben obviar las tareas de mantenimiento. Aunque los trabajos y el coste de los mismos son inferiores que en los terrenos naturales, no se pueden obviar una serie de cuidados periódicos para garantizar la seguridad de los jugadores -evitando el riesgo de lesión- y alargar el tiempo de vida del campo.
A este respecto, Mercedes Sanchís Almenara, investigadora de I+D del IBV, especializada en el ámbito de deporte, considera que debe tenerse en cuenta que
"la vida útil de estos pavimentos es limitada" , debido a que el uso de los mismos provoca la pérdida de propiedades. Por su experiencia constata que
"todavía existe la falsa creencia de que una superficie artificial es para toda la vida y que no precisa mantenimiento. Ahora mismo todos sabemos que sí que lo necesita y para que el campo esté en buenas condiciones y sea seguro para la práctica deportiva precisa de un mantenimiento riguroso y periódico" .
Ante esta realidad, y con el objetivo de conservar las cualidades técnicas del terreno de juego durante el mayor tiempo posible,
Ecoturf desarrollará la mencionada herramienta informática que instruirá a los gestores deportivos sobre qué operaciones de mantenimiento deben realizar
"para que el campo esté siempre en condiciones óptimas" . Con la ejecución correcta de estos trabajos, la vida útil del césped artificial puede ser ampliada en un 20%.
La iniciativa
Ecoturf cuenta con un presupuesto de 502.786 euros y se integra dentro del Programa Europeo Eco-innovación, cuyo presupuesto total alcanza los 53 millones de euros para el periodo 2007-2013. La Comisión Europea, en la lucha por un medioambiente sostenible, financia a través de este programa, productos, servicios o métodos de negocio innovadores que se comprometan al desarrollo sostenible reduciendo el impacto medioambiental, por el uso eficiente y responsable de los recursos naturales, o la energía.
Fuente:
Notigras