Schneider Electric , especialista global en gestión de la energía, presenta
Altistart 22 , su nuevo arrancador progresivo con protección de motor, contactor de bypass integrado y control de tres fases.
El arrancador progresivo
Altistart 22 admite el arranque y la parada controlados, a través de la tensión y el par de motores asíncronos trifásicos para potencias de entre 4 y 400 Kw, y tensiones de alimentación de 208 a 600 Vca.
Este dispositivo está preparado para utilizarse en aplicaciones estándar con protección del motor de Clase 10.
El arrancador progresivo
Altistart 22 ha sido diseñado para satisfacer las necesidades de rendimiento de aquellas aplicaciones en las que la solidez, la seguridad del personal y de los equipos, y una puesta en marcha sencilla resultan fundamentales. El uso de la función de bypass se ha simplificado mediante su integración en el arrancador. Este enfoque se ajusta a las aplicaciones en las que puede resultar necesario el bypass al final de proceso de arranque, por ejemplo, con el fin de limitar su disipación de calor.
Altistart 22 dispone de un terminal de visualización integrado que permite al usuario modificar los parámetros de programación y de ajuste o supervisión energética con el fin de adaptar y personalizar la aplicación.
El arrancador también ofrece protección térmica para los motores, así como una función de supervisión para las máquinas y, gracias al nuevo software de configuración SoMove, permite poner en marcha la instalación inmediatamente.
Las funciones integradas del arrancador progresivo
Altistart 22 son compatibles con los tipos de aplicaciones más habituales presentes en los sectores industrial, de la construcción o de infraestructuras:
• Bombas centrífugas, bombas de pistón.
• Ventiladores.
• Compresores de tornillo, etc.
• Manutención (cintas transportadoras, etc.).
• Máquinas especializadas (agitadores, mezcladores, máquinas centrifugadoras).
El arrancador progresivo
Altistart 22 representa una solución verdaderamente rentable, ya que ofrece:
• Una reducción de los costes de instalación, al optimizar el tamaño de los productos, integrar la función de bypass y acortar el tiempo de cableado.
• Una disminución de la tensión asociada a la distribución eléctrica, al reducir los picos de corriente y las caídas de tensión ocasionadas por el arranque de los motores.
• Una reducción de los costes de funcionamiento de las máquinas, al acortarse la tensión mecánica.
El control de las tres fases de los bobinados del motor asegura que el rendimiento siga siendo satisfactorio, sea cual sea la situación (con o sin carga, todos los rangos de tensión de alimentación, etc.).
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