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Ante la aplicación de los sucesivos plazos de la normativa (CE nº20377/2000) que restringe el uso de refrigerante R-22 en equipos de climatización existentes, Daikin recomienda adelantarse a los posibles problemas de suministro de este refrigerante, reemplazando los equipos por otros más eficientes.

En este sentido, la compañía también aconseja solicitar las subvenciones de los planes Renove que se están poniendo en marcha en distintas zonas de España. Se trata de una excelente oportunidad para sustituir los equipos antiguos con refrigerante R-22, y con un gran consumo, por equipos nuevos con refrigerante R-410, que aportan a sus usuarios gran eficiencia energética y, por lo tanto, un mayor ahorro.

Desde el pasado 1 de enero de 2010 el uso del R-22, como HCFC, está regulado por el reglamento europeo que impide la recarga de las unidades con refrigerante nuevo, por lo que desde esa fecha ya no es posible encontrar R-22 puro. La cantidad de dicho refrigerante reciclado es claramente insuficiente para abastecer el mercado, lo que repercutirá en el aumento de su precio. Pero, además, a partir del 1 de enero de 2015 la prohibición se extenderá a la utilización de HCFC reciclado para el mantenimiento y recarga de cualquier equipo de refrigeración y aire acondicionado.

Por otra parte, la sustitución de equipos industriales con R-22 por otros actuales ayudará a la obtención de las subvenciones del PAEE 4 (Plan de Ahorro de eficiencia Energética) que incentiva cualquier mejora en los edificios encaminados a la minimización del consumo de energía.

Nuevos sistemas Replacement R-410, la mejor alternativa

Una buena alternativa es la sustitución de equipos VRV y Sky Air por la gama Replacement de R-410A, que permiten reutilizar las tuberías existentes minimizando el impacto en el edificio y la inversión. Además, siempre con el objetivo de maximizar el rendimiento estacional, se ofrecen enfriadoras con compresor monotornillo Inverter (ESEER>4) que seguro permitirán amortizar la inversión en tiempos muy reducidos.

De tal forma, Daikin, fiel a su política de innovación y con el propósito de introducir en el mercado soluciones que se adapten a las nuevas circunstancias, ha diseñado equipos con R-410 capaces de funcionar con las tuberías de R-22. Con ello, el tiempo total de sustitución y, por lo tanto, el coste total disminuyen, al respetar la instalación existente, además de reducirse los costes de mantenimiento al instalar los equipos nuevos.

Los equipos Replacement con R-410 ofrecen un mayor rendimiento que los antiguos de R-22. Cabe destacar que Daikin es, en la actualidad, la única empresa del mundo con fabricación conjunta de equipos de aire acondicionado y gases refrigerantes.

Pensando en el medio ambiente

Ahorrar energía significa reducir el gasto y las emisiones de CO2 a la atmósfera. De tal forma, un equipo nuevo VRV con refrigerante R-410A emite al año un 41% menos de CO2 que un VRV antiguo con R-22, lo que equivale a plantar 7.355 árboles anuales. Por su parte, las emisiones en un año de CO2 de una enfriadora con R-410A son un 26% menor que las producidas por una enfriadora con R-22, lo que es equiparable a plantar cada año 3.552 árboles.

En el ámbito doméstico, la mayor parte de los equipos de aire acondicionado anteriores al año 2004 emplea refrigerantes R-22, muchos de ellos son no Inverter y su etiqueta energética es E, F o G, es decir, que consumen hasta el doble que los equipos con refrigerante R-410A (etiqueta A). hay que tener en cuenta que un equipo de acondicionado Clase A emite 72 Kg menos de CO2 a la atmósfera al año que uno de Clase G, lo que equivale plantar 218 árboles anualmente.

Plan Renove en la Comunidad Valenciana

Los comercios ya pueden adherirse al Plan Renove de Aire Acondicionado en la Comunidad Valenciana, que estará vigente hasta el 30 de septiembre de 2010, o hasta agotar fondos, cuyo total es de 1,5 millones de euros.

Las ayudas están destinadas a la sustitución de equipos de aire acondicionado antiguos por equipos nuevos de clase A, con una potencia térmica nominal menor o igual a 12 kW, pertenecientes a instalaciones ubicadas en la Comunidad de Valencia. La cuantía de las ayudas, en función de la potencia frigorífica del equipo adquirido, varía entre los 150 y 500 euros (reducción cuya cuantía no podrá superar el 25% del coste total de la instalación).