Novedad

Schneider Electric, especialista global en gestión de energía y líder en eficiencia energética, ha presentado OsiSense™ XUK-S, una nueva gama de sensores dirigida a entornos industriales severos o que requieran grados altos de higiene ya que gracias a su diseño no exige ningún tipo de protección adicional.

OsiSense™ XUK-S es un dispositivo compacto (50x50x23 mm) de fácil instalación que incluye modos de detección con borrado de plano posterior, réflex polarizado y barrera. Para asegurar su durabilidad y protección, los sensores se presentan en un cuerpo de acero inoxidable 316L, además tiene grado de protección IP69K y certificado Ecolab, que garantiza su resistencia para la industria de procesamiento de alimentos y bebidas.

La superficie exterior es extremadamente lisa, sin rugosidades, para impedir la acumulación de suciedad y facilitar el lavado con detergentes agresivos y chorros de agua a alta presión con picos de temperatura de 100°C. Así, gracias a estas características, el sensor puede llegar a tomar contacto con el producto a detectar sin riesgo a que sus elementos se dañen.

El sensor puede adquirirse configurado de fábrica o puede ajustarse directamente con el botón de programación, que puede usarse como elemento de bloqueo para evitar un uso imprevisto. Para asegurar la estanqueidad y protección del sensor, el botón de configuración se encuentra sellado herméticamente. Este tipo de estanqueidad hace que la solución pueda instalarse en plantas con altos requerimientos higiénicos, como la industria agroalimentaria, la farmacéutica, la biomédica o el empaque especial.

Para facilitar su programación e instalación, el OsiSense™ XUK-S cuenta con salidas programables -normalmente abiertas o normalmente cerradas- y utiliza una conexión en formato M12. Además, en el momento de su alienación, el sensor utiliza una luz visible roja, que facilita la instalación. Es, así, un sensor adaptable y seguro.