Whirlpool , líder mundial en fabricación y comercialización de electrodomésticos, viaja a Nueva York, la ciudad más cosmopolita del mundo, para recrear esta original encimera de inducción con serigrafiado de los impresionantes rascacielos de la Gran Manzana.
Manhattan y su skyline se trasladan a las cocinas más vanguardistas del momento convirtiendo la experiencia de cocinar en algo único y personal. Exclusividad y sofisticación en una vitrocerámica de diseño moderno y minimalista que, mediante líneas rectas y puras, logra convertirse en una pequeña obra de arte adaptada a las últimas tendencias de moda.
El corazón de Nueva York inspira esta vitrocerámica y lleva a todos los hogares una de las más impresionantes panorámicas de la ciudad de los rascacielos y una de las imágenes más fotografiadas del mundo. El Puente de Brooklyn, uno de los símbolos más reconocibles de la ciudad, enmarca esta mágica inducción convirtiéndola en el centro de todas las miradas.
Además de este original diseño,
Whirlpool introduce una novedad en la zona central de 28 cm que, además de ser doble, garantiza una cocción uniforme de los alimentos, especialmente cuando se utilizan recipientes de grandes dimensiones. Esta mejora, junto con las tres zonas de cocción, sus 9 niveles de potencia y el Booster, situado en cada una de las tres zonas, permite unos resultados inmejorables para realizar las mejores recetas en casa.
Por su parte,
la función Booster permite hervir rápidamente grandes volúmenes de agua o calentar el aceite en cuestión de segundos. Además, ofrece una gran flexibilidad que hace que puedan usarse todos los fuegos a la vez y a distintas potencias; o programarlos todos, según convenga en cada momento, para que, al finalizar la cocción programada, el fuego se apague automáticamente y avise con una señal acústica.
Disponer en casa de una encimera de inducción significa ganar en rapidez, ya que es un
50% más rápida que una vitrocerámica convencional, además de ayudar a
ahorrar hasta un 60% de energía respecto a una encimera de gas. Una de las mayores ventajas de esta encimera es su previsión a la hora de cocinar ya que, al seleccionar la potencia, se calienta de inmediato y, al apagarla, se enfría totalmente en 6 minutos respecto a los 25 que invierte una vitrocerámica convencional.