Grupo Cosentino , líder mundial en la producción y distribución de superficies de cuarzo, piedra natural y superficies recicladas, ha participado en uno de los procesos de restauración más relevantes de los últimos años a nivel mundial. El Patio de los Leones es la estancia más conocida de la Alhambra, conjunto palaciego declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1984.
El más importante monumento nazarí del mundo, visitado cada año por casi tres millones de personas, ha culminado el proceso de restauración del citado patio, que se inició hace ya 10 años, con los recientes trabajos de solado. La pavimentación ha sido diseñada por el arquitecto Pedro Salmerón que, para su estudio, se ha documentado en los patios árabes coetáneos del siglo XIV. La empresa encargada del trabajo ha sido Construcciones Otero, y se ha confiado en
Cosentino como el mejor proveedor de la tipología, especificaciones y trabajos necesarios en lo relativo al mármol blanco requerido para la restauración. Asimismo, la empresa Cuellar Arquitectura del Mármol ha realizado diversos trabajos especiales aportando una inclinación especial a las baldosas elaboradas para la obra.
Desde 1987, cuando se realizó la última intervención en el Patio de los Leones y hasta la actualidad, el suelo de este espacio estaba cubierto de grava, lo que propiciaba su dispersión por el resto del palacio. Esto hizo que, por motivos de conservación, se prohibiera el acceso al Patio de los Leones, que los turistas solo podían apreciar desde un perímetro habilitado al efecto. La sustitución de la grava por el mármol permite ahora de nuevo a los visitantes acceder al Patio.
Los trabajos comenzaron a finales del pasado mes de abril con la protección exterior de la fuente y el corte del suministro de agua. Paralelamente, desde
Cosentino se prepararon diferentes materiales de muestras y trabajos previos con el mármol Blanco Macael, principalmente una serie de bloques aserrados en cuatro centímetros de grosor y varias tablas con acabado apomazado y cepillado. Y es que las necesidades específicas marcadas por el arquitecto responsable y el Patronato de la Alhambra para este espacio singular, tanto de formato de las placas, acabado, veteado y tonalidades de blanco, han requerido un importante trabajo previo tanto sobre el material extraído de las canteras de
Cosentino , como en los talleres de elaboración.
Los trabajos de solado han tenido el apoyo además de un equipo especializado de última tecnología, con instrumentación para la toma de registros y análisis, una estación meteorológica para evaluar comportamientos de los bienes en el microclima del lugar, y un sistema de seguridad avanzado.
La pavimentación en sí se inició a mediados del mes de mayo con la colocación de la primera losa de mármol, con un peso de 156 kilos, en el cuadrante 1. Los citados trabajos se han desarrollado bajo un entramado de cuadrículas, repartidas entre las cuatro zonas principales del espacio. El Patio de los Leones se extiende sobre una planta rectangular dividida en cuatro partes diferenciadas. En torno al patio corre una galería, más estrecha en los pasillos largos y mayor en los anchos. En los extremos se abren dos cenadores que penetran en el rectángulo que dibuja el patio. La galería está sostenida por 124 columnas también de mármol blanco de Macael, formando grupos en los ángulos y en las esquinas de los dos cenadores.
En total, se han colocado un total de 250 piezas de mármol para una superficie de casi 400 metros cuadrados de suelo. Todas tienen medidas y pesos diferentes, que oscilan entre los 50 y los casi 400 kilos, con características especialmente diseñadas para el espacio. Finalmente, el pasado 27 de julio se produjo la reapertura oficial del Patio, misma fecha desde la que ya es accesible a todos los visitantes que acudan a Granada.
Con esta intervención, el Patio de los Leones recupera su imagen histórica tal y como el sultán Muhammad V lo concibió en el siglo XIV como Casa Real Nazarí, y como fue relatado por los primeros cronistas de la época, como Jerónimo Münzer, que describieron este espacio como un patio solado en mármol blanco. Está documentado que el primitivo patio fue también pavimentado con piedra natural arrancada y transportada al Palacio rojo desde las canteras de Los Filabres.
Ahora, cinco siglos después, las nuevas piezas han llegado a la Alhambra previamente cortadas y tratadas por
Cosentino . Tras la restauración de los leones, la fuente y el sistema hidráulico, la colocación de suelo de mármol completa la rehabilitación del patio más célebre de la Alhambra, y uno de los espacios más hermosos del mundo.