Después de un extenso proceso,
Alsina ha conseguido certificar su sistema
Alsipercha para los exigentes mercados de Estados Unidos y Canadá.
Alsipercha es un sistema diseñado para prevenir las caídas de los operarios en la obra, tratándose de una solución única en el mundo dentro del sector de la construcción.
La inquietud de
Alsina en mejorar la seguridad durante el proceso de encofrado fue el detonante para desarrollar esta solución. En un principio fue diseñada para ser usada con los sistemas de encofrado de losas, Mecanoconcept, de
Alsina . Pero hoy en día se está ampliando su ámbito de aplicación a otro tipo de obras y trabajos como son la rehabilitación, el mantenimiento industrial y la descarga de camiones.
Alsipercha ha recibido numerosos premios y menciones por parte de los organismos de innovación y seguridad. Pero el mayor reconocimiento obtenido es el que se desprende de su uso por parte de todas las empresas constructoras que colaboran con
Alsina en todo el mundo, especialmente en Europa, donde no existe ninguna solución similar.
La estricta normativa del mercado norte americano y canadiense no ha sido un impedimento para certificar el
Alsipercha . El proceso se ha llevado a cabo contando con la ayuda de una ingeniería experta en temas de seguridad y en estrecha colaboración con los comités para la prevención de caídas en altura tanto en EE.UU como en Canadá. Para conseguir las certificaciones correspondientes, ANSI Z359.6 para USA y CSA Z259.16 para Canadà, ambas relativas a los requerimientos especificos para el diseño y funcionamiento de los sistemas anti-caídas para operarios,
Alsina ha realizado las adaptaciones necesarias al sistema, principalmente en el tubo diagonal, y sin alterar el diseño original del resto de componentes. Los accesorios que componen el
Alsipercha (sistema retráctil, arnés, etc.) se adquieren directamente en el mercado americano, puesto que deben cumplir con la normativa concreta de su mercado.
Además,
Alsipercha también cuenta con el certificado CE otorgado por el prestigioso laboratorio alemán BG, el cual implica pasar unos exhaustivos controles tanto en el proceso de fabricación como en el funcionamiento del sistema. El marcado CE garantiza el cumplimiento con las Directivas Europeas, y en consecuencia, la posibilidad de comercializar el producto de forma automática en cualquier país de la Unión Europea.