Existen dos motivos fundamentales para poner en funcionamiento este proyecto. El primero de ellos es debido al incremento desmesurado de la demanda energética a nivel global; demanda energética que por otro lado es cubierta en su inmensa mayoría por el uso de combustibles fósiles contaminantes y de cantidades limitadas. Por este motivo debemos aprovechar todas las fuentes de energía disponibles y cambiar el modelo energético hacia uno más eficiente y menos contaminante. El segundo motivo, inherente siempre al primero, es la emisión de gases de efecto invernadero, gases ácidos y partículas en suspensión generados todos ellos en la combustión de dichos combustibles fósiles, y que tanto a nivel local como a nivel global producen lo que llamamos contaminación atmosférica y calentamiento de la atmósfera.
Son varios las compañías que participan en este proyecto: E.On, Urbaser y Circutor, este último como líder del proyecto en Barcelona. Los sistemas desarrollados comprenden un equipo que permite regular la producción de energía acumulada de los sistemas fotovoltaicos de forma que, instalando una potencia razonable que permita cubrir la demanda en horas punta solar, se module la potencia de los inversores Fronius IG Plus con reguladores CDP-0para producir, en todo momento, exactamente lo que se requiere con el fin de cubrir dicha demanda y no verter electricidad a la red.
La instalación que la empresa Urbaser ha realizado en el interior de su nave en Barcelona, tiene conectados módulos fotovoltaicos y grupo de tres inversores monofásicos de conexión a red
Fronius con una potencia de 15 kW nominales para alimentar a una red trifásica, garantizando su adecuación para cualquier tamaño de instalación. Con rendimiento máximo del 95,9%, la serie Fronius IG Plus 50 V-1 alcanza uno de los valores más altos entre los inversores con transformador. Los módulos fotovoltaicos están instalados sobre la cubierta de una de las naves de aparcamiento del recinto en el que Urbaser gestiona el servicio de recogida de residuos y limpieza de la vía pública en el turno de noche con los coches eléctricos para que asíse puedan cargar los vehículos aprovechando los rayos del sol.
Las baterías empleadas como pulmón energético para la producción de energía son reutilizadas para un consumo adicional durante las horas de menos radiación solar, permitiendo un rendimiento extra del sistema y una mayor protección medioambiental.
Este modelo, puesto en marcha en noviembre de 2013, ya está cubriendo el 25% del consumo total, contando además que son los meses de menor insolación, demostrando una vez más la viabilidad y beneficios de proyectos de autoconsumo con energía solar fotovoltaica en convivencia con la red eléctrica.