Tres proyectos españoles, la discoteca Canalla de Pamplona, una vivienda en el campo en Segovia y una villa privada en Mallorca, son los tres proyectos españoles que se han presentado en esta edición de los
Premios Europeos del Cobre en la Arquitectura . El concurso, que este año celebra su décimo séptima edición, se han consolidado en las últimas décadas como el certamen bianual de referencia en el sector de la arquitectura realizada con cobre o aleaciones. La calidad de los proyectos presentados y la composición del jurado, formado por arquitectos de reconocido prestigio internacional, han sido los factores claves que han potenciado la relevancia de este certamen.
Discoteca Canalla: destellos de luz, vibración y movimiento El estudio
Vaillo Irigaray Architects ha planteado una reforma de una antigua discoteca, con el objetivo de lograr destellos de las luces de colores en una caja oscura. La discoteca se concibe como un sintonizador de luz, sonido y movimiento y basa su organización espacial en tres elementos: la zona de baile o mayor vibración, un área en los extremos más cogedora conformada como cajas doradas y la barra longitudinal que recorre todo el local como hilo conductor de la graduación especial. Para la realización de este proyecto se ha utilizado cobre, acero negro y latón.
Vivienda en el campo: protección contra climatología extrema El proyecto desarrollado por
Forero Arquitectura se diseño para un edificio rural ubicado en la Sierra de Guadarrama, y por lo tanto, sujeto a condiciones climáticas extremas: radiación solar, nieve, grandes oscilaciones de temperatura y fuertes tormentas. En este proyecto, el cobre protege todo el edificio con cubiertas planas e inclinadas. Asimismo, los canalones y las bajantes de cobre, que se patinarán de forma natural con el tiempo al igual que la cubierta, aseguran una larga vida útil a la vivienda.
Villa privada en Mallorca: cómo hacer nuevo una edificación abandonada hace 10 años El
Studio-Mishin Architectural Bureau ha tenido que plantear una reforma integral de una vivienda de hormigón abandonada hace 10 años, teniendo en cuenta además, que la normativa local no permitía realizar cambios en la envoltura del edificio. El complejo de la villa cuenta con un laberinto de estructuras que desciende la empinada ladera de una montaña rocosa. El elemento central de la casa es un "gavión verde", un espacio vacío de cobre cortado a láser, rellenado con plantas trepadoras que cruza toda la vivienda de este a oeste separando el espacio en zonas de estar y de servicio. Para el interior de la casa también se ha utilizado el cobre, especialmente en la escalera, elaborada con paneles de madera revestidos de cobre.
La celebración de los
Premios Europeos del Cobre en la Arquitectura durante las dos últimas décadas ha permitido contrastar como se ha producido un cambio significativo en la utilización del cobre destinado a edificios. Este material ha pasado de utilizarse tradicionalmente en exclusiva en las cubiertas, a convertirse en una pieza con multitud de posibilidades en todo tipo de elementos arquitectónicos, especialmente en las fachadas de las construcciones contemporáneas.