En Zahara de los Atunes (Cádiz) se encuentra uno de los hoteles con mayor encanto de la costa gaditana. El Hotel Atlántico cuenta en la actualidad con un total de 23 habitaciones y su categoría es de 4 estrellas. Pero para convertirse en el ejemplo de la arquitectura de interiores para hoteles que es hoy en día, necesitó una reforma integral realizada por el estudio
Urbipac .
En nuestro post te contamos paso a paso cómo se llevó a cabo la reforma de este hotel situado a orillas del mar.
Proyecto de arquitectura de interiores para un hotel con mucho encanto Durante su primera visita al
Hotel Atlántico , el estudio Urbipac se encontró con un auténtico diamante en bruto.
El edificio donde actualmente se ubica este complejo hotelero estaba sin uso y sin distribuir interiormente . El equipo tenía claro que para convertirlo en un auténtico hotel de 4 estrellas, necesitaban realizar una profunda reforma integral donde la arquitectura de interiores cobraba una relevancia total.
El primer reto era distribuir de forma adecuada los 1825,96 m² que componen la parcela. Para ello, plantearon una distribución que diferenciaba un total de cuatro plantas, cada una con una función específica pero con un objetivo en común: ofrecer el mejor servicio a los clientes.
Los arquitectos Carlos Villalba y Fernando Martín se decantaron por destinar la planta sótano a albergar las instalaciones eléctricas y de fontanería del hotel. En este nivel se incluyeron también la lavandería, la bodega, los almacenes, el montacargas y un parking con 16 plazas.
Los accesos al edificio se situaron en la planta baja, tanto para el personal como para los huéspedes. Es aquí donde se encuentra la recepción del hotel, acompañada de un amplio salón-lobby y de un comedor que cuenta con buffet, bar y cocina.
Además, en este nivel se incluyeron un total de 7 habitaciones: 5 habitaciones dobles, 1 habitación Suite Junior y 1 habitación doble adaptada. Sin embargo, el resto de unidades de alojamiento las encontramos en la primera planta. Esta superficie de 666,70 m² cuenta también con una zona al aire libre chill-out y barra, destinada al descanso y disfrute de los huéspedes.
Precisamente, con esta finalidad se diseñó un espacio al aire libre en la planta cubierta. el estudio Urbipac se decantó por la instalación de una terraza balinesa y una zona de solárium, que se completaron con una sala de fitness, para conseguir transportar a los clientes a un entorno idílico de paz y relajación.
La arquitectura de interiores para la creación de espacios públicos en el Hotel Atlántico Dos son los tipos de espacios principales que podemos distinguir en los proyectos de arquitectura de interiores para hoteles. Nos referimos a los espacios privados, es decir, las habitaciones que componen un complejo hotelero. Y, por otro lado, los espacios públicos como el hall, el restaurante o el lobby donde los clientes hacen vida en común durante su estancia.
Es precisamente en este último tipo de espacios donde se percibe una mayor evolución en cuanto a los diseños. En la actualidad, estas zonas no solo persiguen ofrecer la máxima funcionalidad a los usuarios, sino también un mayor grado de confort sin perder de vista el determinante componente estético. De ahí que cada vez más los hoteles elaboren cuidadosos proyectos de arquitectura de interiores donde
el mobiliario, la decoración, la iluminación y los elementos arquitectónicos siguen una misma línea destinada a ofrecer una experiencia única a los huéspedes en todos los sentidos .
En el proyecto del Hotel Atlántico, todos estos elementos confluyen a la perfección. Muestra de ello es la labor realizada por los arquitectos ya desde la entrada principal, ubicada en el vértice del triángulo formado por las fachadas exteriores. Con el fin de dotar de una mayor relevancia a este acceso, se propuso un diseño con marquesina que indica el punto de entrada.
En el umbral se decidió instalar un cortafríos de vidrio "securit" que incluye el logotipo del hotel. Con este elemento se consigue aportar un mayor grado de luminosidad al hall, favoreciendo la entrada de luz natural, así como una mayor sensación de amplitud. A su vez, la utilización del vidrio como material principal permite también encontrar a simple vista la recepción. Así, los clientes se pueden orientar rápidamente en su primera visita al saber rápidamente a dónde deben acudir con tan solo un vistazo.
Además, los metros cuadrados de este nivel (718,30 m²) se aprovecharon para ubicar otras zonas públicas como las salas de estar, el restaurante o el lobby. Dotados de un característico estilo contemporáneo, estos espacios destacan por su concepto abierto y diáfano, potenciado todavía más por el empleo de una paleta de colores claros en los revestimientos y techos. Esta gama cromática contrasta a la perfección con los elementos metalizados como lámparas, el mostrador con delicado efecto mosaico o incluso las columnas, así como con el mobiliario en tonos oscuros que apreciamos en cada una de estas estancias. El conjunto decorativo destila sofisticación y elegancia.
A estas zonas destinadas al uso de los clientes se unen también dos de los rincones con más encanto del alojamiento. Nos referimos a la terraza de verano, situada en la primera planta, y al solárium, en el último nivel. Ambos espacios fueron creados por Urbipac con el objetivo de conformar un pequeño oasis de descanso y esparcimiento para los clientes del hotel. Para ello, se decantaron por un mobiliario de uso estival de estética chill-out en el que destacan las hamacas de líneas rectas, desde las que ofrecer una vista incomparable a la montaña Atlanterra.
Cómo crear espacios privados con la Arquitectura de interiores La arquitectura de interiores para hoteles debe aunar en cada proyecto comodidad, funcionalidad y estética. Conseguir reunir estos tres principios en un mismo diseño no es sencillo, pero Urbipac lo ha conseguido en el Hotel Atlántico.
Buena prueba de ello, la encontramos en los espacios privados que el estudio ha creado con el objetivo de dotar a las estancias de un cuidado estilo contemporáneo y que se dividen en tres tipos: dobles estándar, dobles con terraza y junior suite. Para conseguir impregnar a cada habitación del hotel esta particular marca personal,
los arquitectos de interiores se decantaron por la creación de espacios diáfanos y luminosos donde los colores claros cobran protagonismo .
La gama de los blancos, arenas y beige es la elegida para dar color a las habitaciones. Estas tonalidades son las elegidas tanto para las paredes como para el mobiliario y los textiles de la cama. Además de por aportar una mayor sensación de amplitud, esta gama cromática se caracteriza por transmitir una sensación de paz, pureza y pulcritud. De ahí que sea especialmente utilizada en los proyectos de interiorismo hotelero.
El blanco se extiende hasta los cuartos de baño privados de cada estancia. Las baldosas, con marcadas vetas en tonos grises, contrastan a la perfección con el gresite nacarado elegido para las paredes. Este revestimiento, unido al resto de materiales utilizados, logra recrear al detalle un spa donde los huéspedes pueden relajarse.
Esta misma línea tonal se extiende también a los mecanismos eléctricos instalados en las habitaciones. Urbipac utilizó los mecanismos de la
serie BJC Mega debido a su perfecta integración con la decoración del establecimiento, ya que permite personalizar los espacios para crear atmósferas únicas con sus cuidados diseños.
Más información sobre el proyecto: Proyecto: "Hotel Atlántico"
Estudio: Urbipac, Servicios Integrales de Arquitectura e Ingeniería
Arquitectos: Carlos Villalba Fernández y Fernando Martín Sanjúan
Arquitectos técnicos: José Luis Pérez Chamorro y Susana Pérez Hidalgo
Ingeniero T. Industrial: Miguel Ángel Guerrero Domínguez
Ubicación: Zahara de los Atunes
Parcela: 1825,96 m²