El
SATE dota al edificio de un
buen funcionamiento térmico minimizando la aparición de
puentes térmicos convierten el muro de cerramiento en un acumulador de calor que mejora sustancialmente la inercia térmica del edificio contribuyendo de manera decisiva al
confort térmico y reduciendo considerablemente el uso de calefacción y aire acondicionado.
Los sistemas de
aislamiento térmico por el exterior se denominan mayoritariamente en Europa
ETICS (Siglas de External thermal insulation composite systems), en España también se conocen como
SATE (traducción al español del término anterior) o
EIFS (básicamente en EEUU).
El
SATE consiste en un material aislante adherido sobre el muro cuya fijación puede ser mecánica, mediante adhesivo o por combinación de ambas. El aislante se protege con un revestimiento constituido por una o varias capas aplicadas in situ, una de las cuales contiene una malla de refuerzo; este revestimiento se aplica directamente al panel
aislante , sin intersticios de aire o capa discontinua. Todos los materiales que componen el
Sistema SATE deben contar con el Documento de Idoneidad Técnica Europeo DITE.
Pueden aplicarse tanto en edificios de nueva construcción como en intervenciones de rehabilitación sin necesidad, en este último caso, de desalojar las viviendas. Se adapta tanto a condiciones climáticas suaves como a las más severas. La industria ofrece una gran variedad de
materiales de aislamiento , y sus diversos espesores permiten garantizar el cumplimiento de las condiciones del Documento Básico sobre Ahorro Energético del Código Técnico, para cualquier clima.
El DB HE1 en su sección 1 referente a: Limitación de demanda energética, dispone que los edificios dispondrán de una
"envolvente térmica" que limite adecuadamente la demanda energética, necesaria para alcanzar el bienestar térmico. Quedan obligados los edificios de nueva construcción mediante la obtención de la etiqueta energética y también los edificios rehabilitados de más de 1000m2 de superficie útil con intervención de más del 25% de la fachada.
A este respecto hemos de tener presente que El 58% de los 25,2 millones de viviendas que hay en España se construyeron antes de 1981 por lo que presentan sustanciales deficiencias de confort térmico y habitabilidad que deberán de irse adecuando a la legislación vigente en los próximos años.
Características técnicas Las principales características técnicas del sistema pivotan sobre dos ejes principales, la mejorar la inercia térmica de los edificios y minimizar la aparición de puentes térmicos.
La contribución del
SATE a la
mejora de la inercia térmica es esencial. La inercia térmica es la capacidad de un material para aguantar el calor y esta vinculada directamente con la acumulación de energía. Los cerramientos con mucha inercia acumulan mucha energía, que actúa como un colchón protector de las fluctuaciones de las temperaturas exteriores, así por ejemplo en aquellas construcciones a base de grandes muros como iglesias o casonas rurales la temperatura interior difiere mucho de la exterior, por la gran masa térmica de los cerramientos. Sin embargo en las nuevas construcciones no es posible realizar estos grandes muros para controlar las temperaturas interiores, por ello se realizan cerramientos en los que se incluyen materiales aislantes, obteniendo los mismos valores de
eficiencia térmica siendo más ligeros. Cuando situamos el
aislamiento cerca del interior solo aporta entre el 10/ 20% de su masa térmica a la inercia del local, sin embargo cuando el
aislamiento está situado por la cara exterior del cerramiento (SATE) aportará el 90% de la masa del cerramiento a la inercia térmica del local.
En el ámbito del tratamiento de los
puentes térmicos , al ser sistemas continuos por el exterior facilitan al proyectista su eventual resolución.
Existe la costumbre de construir los cerramientos apoyados parcialmente sobre los bordes de los forjados, utilizando el apoyo del ladrillo cerámico en 2/3 de su anchura, con cámara de aislamiento y tabique cerámico. Este tipo de cerramiento genera
puentes térmicos en la envolvente del edificio, aumentándose en aquellos en los cuales el cerramiento se vea afectado por la necesidad de albergar también los soportes estructurales verticales.
Así mismo, los vanos del cerramiento donde se ubican las ventanas o puertas presentan un
puente térmico en la zona del dintel ya que para que recibir la carga del cerramiento que tiene encima y transmitirla a las jambas, se realiza habitualmente con una vigueta de hormigón que suele encontrarse vista, desprovista recubrimiento.
El
aislamiento por el exterior resuelve estos
puentes térmicos tanto en obra nueva como en rehabilitación ya que todo el espesor del elemento aislante es pasante con la
envolvente del edificio.