La iluminación sufrió una revolución tecnológica con la irrupción del LED, y la digitalización que esto ha significado. Cómo la mayoría de los sectores, se encuentra sumergida en una oleada de cambios y transformaciones constantes.
Para entender cuáles son los nuevos retos a los que se enfrenta la iluminación, es necesario comprender su evolución. En la medida en la que la tecnología ha ido avanzando la iluminación ha ido "madurando" y también las necesidades de los usuarios, pasando por diferentes etapas: luz funcional, eficiente, confortable, etc. En la actualidad nos encontramos en un momento en el que los usuarios, son más conscientes, tienen un ritmo de vida más dinámico y están más preocupados por el bienestar, en este momento
la iluminación debe volverse emocional, conectada e intuitiva .
Los espacios arquitectónicos, también se están transformando para abrazar los nuevos estilos de vida. De esta manera los espacios de trabajo se tornan más
flexibles, adaptables y dinámicos , los espacios de la salud más amables y humanizados, los hoteles y espacios destinados al turismo más
personalizables , las tiendas más experienciales y el entorno urbano más
interactivo . Es necesario, por tanto, contar con soluciones de iluminación que sean dinámicas,
adecuadas para cada espacio, en cada momento y a cada usuario .
Las propuestas más innovadoras nos permiten incorporar, de manera sencilla y sin grandes complejidades de cara a la instalación, sistemas de iluminación con los que poder regular la intensidad lumínica en función del aporte de luz natural, optimizando así el consumo energético, y generando escenas de iluminación que se sincronizan con la variación de la luz natural adaptándose a nuestros ritmos biológicos (ciclo circadiano), de manera que la iluminación va variando en intensidad y tonalidad (2700-6500 K) según avanza la hora del día, respetando nuestros estados naturales de máxima concentración, o relajación, haciendo que el usuario tenga una mayor conexión con el entorno y fomentando su bienestar, o bien, seleccionar el tipo de iluminación específica para la tarea que se va a realizar.
La propuesta de valor de la solución de iluminación dinámica de Lamp no solo trata de añadir una capa de tecnología a los sistemas de iluminación, sino de entender al usuario (sus necesidades y la forma en la que habita un espacio) para buscar su bienestar y maximizar su experiencia, según Ignasi Cusidó (CEO de Lamp):
"para ello es necesario ser un experto en las nuevas tecnologías que están revolucionando nuestro sector, para entender el potencial de las mismas, pero sobre todo poner en valor toda la experiencia y el conocimiento relacionado con la buena iluminación que hemos desarrollado a lo largo de más de 45 años de experiencia en la industria de la iluminación, ese es el ADN de Lamp".
Lamp resuelve estos nuevos retos de la iluminación a partir de dos pilares tecnológicos:
Blanco dinámico y conectividad .
¿Qué es el blanco dinámico y por qué incorporarlo en la planificación de la iluminación de los espacios? La luz tiene un impacto sobre el usuario desde un punto de vista visual, biológico y emocional. Teniendo en cuenta que según los estudios pasamos aproximadamente el 90% de nuestro tiempo en espacios interiores, y que, como hemos visto, estos espacios son cada vez más flexibles, la tecnología de Blanco Dinámico nos permite poder seleccionar entre un amplio rango de tonalidades en una misma luminaria, desde los blancos más cálidos (2700 K) hasta los más fríos (6500 K). Esto es clave para lograr la iluminación óptima de un espacio y adaptable a las diferentes actividades que se desarrollan en él.
Lamp crea una solución dinámica adaptada a los diferentes ámbitos de aplicación, resaltando la
Iluminación general para espacios de oficinas, colegios, hospitales, residencias geriátricas, etc. aportando bienestar y flexibilidad satisfaciendo así los requisitos de los nuevos estándares sobre bienestar en los edificios, como la certificación WELL del International WELL Building Institute. Pero también resolviendo las necesidades de los espacios hoteleros o comerciales.
¿Qué es la iluminación conectada y cómo funciona? La conectividad aplicada a la iluminación permite crear una malla, de todas las luminarias conectadas entre sí en un espacio a través del protocolo estándar BlueTooth Low energy, en el que cada una de ellas se convierte en un nodo inteligente, lo que permite una forma de control
intuitiva, flexible, escalable, táctil y segura permitiendo un mayor grado de interacción por parte del usuario.
Esta nueva capa tecnológica añadida a la iluminación permite además integrar sensores en las luminarias pudiendo recopilar datos que, tras ser convenientemente analizados, pueden ayudar a optimizar el uso de los espacios. Por otra parte, su naturaleza inalámbrica hace que el sistema pueda ser instalado fácilmente, incluso en instalaciones existentes pudiendo ser controlado desde cualquier dispositivo móvil.