¿Por qué se han vuelto tan populares estos sistemas? ¿Os podéis imaginar un verano en el que tengamos que estar en un espacio cerrado y no contemos con ningún tipo de sistema de ventilación? Si bien anteriormente no se les daba mucha importancia y lo más frecuente era instalar tan sólo un extractor de aire en edificios y locales, en la actualidad estos aparatos se han convertido en uno de nuestros mayores aliados para conseguir ventilar un espacio cerrado. Permiten refrescar tanto espacios pequeños como grandes superficies para hacernos sentir más frescos y cómodos.
Su uso está generalizado en muchas viviendas y negocios en todo el país. Digamos que se han convertido en un elemento indispensable en el día a día de muchos, sobre todo en las épocas de temperaturas más extremas. Sin embargo, si te hiciésemos una serie de preguntas acerca de cuáles son los
componentes de un sistema de ventilación , ¿sabrías decirlos todos? Seguramente no… y aquí es donde entra en juego este artículo.
¿Cuáles son los principales tipos de sistemas de ventilación? Antes de definir cuáles son los principales
elementos de un sistema de ventilación , debemos tener en cuenta de que existen diferentes tipos de sistemas y que dependiendo del modelo van a hacer falta unos componentes u otros. Y es que cae de cajón que no es lo mismo ventilar una gran nave industrial que un pequeño apartamento en el que tan sólo vive una persona. En términos generales, estos son los principales sistemas de ventilación que puedes encontrar:
Sistemas de ventilación de flujo simple Se trata del modelo más simple que podemos encontrar. No controla la entrada de aire, sólo la salida. Uno de los
principales componentes de este sistema de ventilación es el extractor, mediante el cual se extrae el aire contaminado para posteriormente ser expulsado al exterior por medio de una serie de conductos.
Sistemas de ventilación de doble flujo En este caso estamos hablando de los sistemas más utilizados en la actualidad por su elevada efectividad. La principal diferencia con respecto a los anteriores es que, además de extraer el aire contaminado y expulsarlo al exterior, se ocupan de tratar el aire que entra en el interior.
Debemos tener en cuenta que, independientemente del tipo de sistema de ventilación, hay varios factores que inciden en su funcionamiento:
- Clima interior: condiciones como la presión y la temperatura ambiental del interior de la estancia condicionan enormemente la percepción y la sensación de confort en las personas.
- Nivel de ahorro energético: las características de cada tipo de sistema de ventilación va a incidir en su eficiencia y consumo energético.
- Nivel de regulación: se trata de uno de los condicionantes que más influyen en el consumo eléctrico del espacio en el que se instala.
Principales componentes de un sistema de ventilación Ahora que ya hemos repasado los principales tipos de sistemas que se emplean en la actualidad, es el momento de entrar a conocer con más profundidad cuáles son los diferentes /b>elementos de un sistema de ventilación y cuál es la utilidad de cada uno de ellos.
Filtro Cuando hablamos del filtro, hablamos de un componente esencial dentro de los elementos de un sistema de ventilación. Su principal función es la de evitar que entre en el interior polvo, suciedad, insectos y en general cualquier tipo de partícula que pueda contaminar el local a ventilar.
El tipo de filtro que se va a utilizar dependerá de la calidad del aire que venga del exterior y también de la calidad del aire que queramos conseguir en el interior.
Resistencias eléctricas, bombas de calor o baterías de agua caliente Su función es la de evitar que entre aire muy frío al interior, con la molestia que esto puede ocasionar. A través de estos componentes se calienta el aire hasta que la estancia adquiera la temperatura deseada.
Batería de enfriamiento Este
elemento de un sistema de calefacción cumple la función contraria que las resistencias eléctricas: enfrían el aire que entra del exterior para conseguir una temperatura adecuada. Existen diferentes tipos, pero las que más se emplean son las de agua fría o las de expansión directa.
Recuperador de calor Desde el punto de vista del consumo energético, el recuperador de calor es el método más eficiente para tratar el aire. Su funcionamiento es sencillo: transfiere el calor (o el frío, en verano) del aire de extracción al aire de entrada utilizando tan solo el consumo energético de uno de sus ventiladores, consiguiendo recuperar hasta un 90% del calor sensible del aire de extracción.
Humidificadores o deshumidificadores A pesar de que no están presentes en todos los sistemas, se trata de un elemento que cada vez podemos encontrar con más frecuencia. Se emplean tanto para añadir como para reducir el porcentaje de humedad en el ambiente hasta conseguir unos niveles más adecuados. Otra de sus utilidades adicionales es el tratamiento antibacteriano, motivo por el que puede ser recomendable para hospitales y centros médicos.
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elementos de un sistema de ventilación . Si todavía no dispones de uno, este es tu momento para hacerte con un sistema de refrigeración de la mano de Met Mann, empresa líder en el sector de la climatización desde hace más de 60 años. ¡Están aquí para asesorarte y ayudarte a elegir el que mejor vaya contigo!