SolarProfit , compañía líder en energía solar fotovoltaica con más de 12 años de experiencia, ha hecho posible evitar la emisión a la atmósfera de 7.214 toneladas de CO
2 tras llevar a cabo más de 2.500 instalaciones en toda España desde su creación. De hecho, la firma con sede en Llinars del Vallès (Barcelona), evita la emisión anual de hasta 975kg de CO
2 a la atmósfera, mediante una instalación particular típica.
El autoconsumo fotovoltaico cuenta con un gran potencial de crecimiento en España por sus múltiples ventajas, ya que permite avanzar hacia un sistema energético libre de combustibles fósiles, principales causantes del cambio climático. Además, se trata de un modelo energético más sostenible que se financia a sí mismo, produciendo energía mediante el aprovechamiento de hasta las 2.692 horas de sol anuales de nuestro país.
La instalación de placas fotovoltaicas no sólo supone un logro para la preservación del medio ambiente, sino que fomenta el consumo responsable de energía. Con ello, una instalación típica de un particular supone la reducción de la dependencia de la red que puede llegar al 80%, lo que permite un importante ahorro en la factura de luz. Así, en unos 7 u 8 años las placas fotovoltaicas se han amortizado, y una vez pasado este tiempo la instalación permite un ahorro anual de alrededor de 800€ en electricidad.
La compañía
SolarProfit , en pleno proceso de expansión antes de iniciarse la crisis sanitaria originada por la Covid-19, cuenta con buenas perspectivas y prevé seguir creciendo. Y es que en general, el sector fotovoltaico prevé mejoras tras la pandemia, a medida que los trámites se agilicen y se incrementen los incentivos fiscales para la instalación de placas solares.
Además de contribuir a los objetivos medioambientales de reducción de emisiones de dióxido de carbono, el impulso de las energías renovables será clave en la recuperación económica mundial tras la emergencia sanitaria.
Según el último informe publicado por la
Agencia Internacional de Energía Renovable promover las energías renovables y hacer que la transición energética sea una parte clave de la recuperación post Covid, elevaría el empleo en el sector hasta los 42 millones en todo el mundo hasta el año 2050.