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El comedor es el lugar de la casa en el que resulta clave tener una buena iluminación con unas lámparas que, además, decoren. Son espacios en los que disfrutamos en familia y recibimos a los amigos y las visitas; el lugar de la casa en el que la estética y la funcionalidad tienen que estar alineadas para crear rincones acogedores y únicos que cumplan con las reglas básicas de la buena iluminación. LEDVANCE, uno de los principales proveedores de iluminación para profesionales y cliente final, ofrece las claves para conseguir un comedor bien iluminado con varias propuestas para alcanzar este objetivo y lograr espacios cómodos y luminosos.

Un proyecto de iluminación bien ejecutado en el comedor de una vivienda debe cubrir las siguientes áreas: mesa de comedor, luz general para toda la estancia y luz de detalle para crear espacios acogedores.

Luz cálida, ligeramente amarillenta

Una de las cosas más importantes es que el tipo de luz que emita la bombilla debe ser cálida, es decir que la temperatura de color esté en torno a los 3.000 Kelvin, lo que proyectará una luz cálida, ligeramente amarillenta. Lo más recomendable es utilizar iluminación Smart + que permitan regular su intensidad y adaptarla a los diferentes momentos.

Mientras se come, la luz puede ser ligeramente más brillante y, para la sobremesa y una buena conversación, podemos bajar la intensidad para crear un ambiente más íntimo y acogedor. Si se ha optado por una mesa de cristal o una mesa con mucho brillo y reflectante, una lámpara colgante puede ser un problema. En este caso, se recomienda utilizar luz indirecta. Los focos LED de LEDVANCE integrados en el techo son una gran opción al distribuir la luz de manera uniforme y no ocupar espacio. No debemos olvidar que las bombillas de led aportan ahorro, eficiencia y durabilidad y no emiten calor.

Según el tamaño del comedor, la cantidad recomendada de lúmenes variará. De manera aproximada, para un comedor de seis metros cuadrados se requieren 2.580 lúmenes; para uno de nueve metros cuadrados, 3.880 lúmenes; para 12 metros cuadrados, alrededor de 5.170 lúmenes y, si el tamaño alcanza los 20 metros cuadrados, se necesitan 8.620 lúmenes.

Para iluminar la mesa de comedor, lo ideal es un péndulo o una luz de suspensión de baja altura. La luz debe ajustarse al tamaño de la mesa para que se ilumine de manera uniforme, debe colgarse a una altura aproximada de 60 centímetros por encima de la mesa, y no debe interferir con el paso de la comida ni provocar que los invitados se golpeen la cabeza con ella.
Es importante que el diseño encaje con la decoración del comedor, pero más relevante aún es tener clara la manera en la que proyecta el haz de luz.

Más allá de la mesa de comedor

El espacio que rodea la mesa de comedor no debe estar oscuro durante la comida. Las opciones de iluminación son casi infinitas. Se pueden instalar, por ejemplo, tiras de luces LED que, además, pueden controlarse desde la mesa con una aplicación del móvil para que cambien de color. Otra posibilidad pasa por instalar velas LED en el alféizar de la ventana o en un aparador del comedor para crear una atmósfera acogedora.

También podemos colocar focos o tiras LED en una vitrina para iluminar el interior, en una estantería o colocar objetivos decorativos como un globo terráqueo con diminutas luces LED sobre una mesa para poner un toque de luz y buen gusto a la estancia. Una lámpara de pie en el rincón de lectura junto a una butaca es también la compañera perfecta. En este caso, es necesario que la luz sea puntual para lograr el toque perfecto y conseguir así un comedor bien iluminado.