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Según la descripción de Neoproof Soluciones Integrales, ha sido una obra de gran complejidad que ha tenido una duración de aproximadamente 2 años. La actuación de los túneles de Glòries de Barcelona ha consistido en la construcción y puesta en funcionamiento de unos túneles urbanos —dos tubos independientes con circulación unidireccional— con una longitud total de 957 metros, que recogerán el tráfico de la Gran Vía, con una IMD media de 90.000 coches al día. Los túneles siguen el trazado de Gran Vía y pasarán por debajo de los cuatro túneles existentes: L1 Metro, R1 línea de Maçanet-Massanes, R3/R4 (líneas de Manresa y Puigcerdà) y la línea de estación de Francia-Sants.

El primer tramo de túnel (longitud de 508 metros) está situado entre las calles de los Castillejos y Badajoz. Es el tramo más profundo, y pasa por debajo de los túneles ferroviarios llegando a 25 metros por debajo de la rasante de la plaza. El segundo tramo de túnel (longitud de 449 metros) irá de la calle de Badajoz a la rambla del Poblenou, será un tramo completamente rectilíneo y con la misma sección en ambos sentidos que discurrirán a una profundidad media de unos 10 metros por debajo de la rasante de Gran Vía.

Se ha innovado en la impermeabilización de túneles al introducir la impermeabilización con membrana de poliurea pura en caliente para bóvedas, hastiales, se ha aplicado también poliurea como refuerzo en los remates finales de la lámina de PVC.

Se ha impermeabilizado bajo losa con lámina de PVC en todos los tramos tanto en excavación a cielo abierto como en mina, hastiales de túneles en mina con PVC y con membrana poliurea, bóveda de túneles en mina con membrana de poliurea, a parte de otros trabajos minoritarios tales como inyecciones de resinas y geles, sellados con morteros, etc.