Aprender a entender la factura de la electricidad y conocer las mejores prácticas para ahorrar energía en las viviendas ha sido el objetivo del Taller Ciudadano de Ahorro de Energía en Viviendas celebrado online dentro del proyecto EnerUSER del Programa Interreg V-A España-Portugal (POCTEP).
"Cualquier acción de ahorro energético en las viviendas pasa por la gestión eficaz de la energía en la vivienda. Principalmente ajustar los modelos de contratación: las tarifas y potencias contratadas", ha recomendado en esta cita telemática
Felipe Romero , director técnico del Instituto de la Construcción de Castilla y León (ICCL).
En el encuentro se ha insistido en la importancia que tiene para los consumidores informarse de la manera más detallada del funcionamiento del mercado de la energía, y en los procesos de optimización de la gestión de los contratos. "Hay un desconocimiento importante sobre cómo funcionan nuestras propias viviendas y nuestros edificios en su conjunto. Con este proyecto del Programa Interreg V-A España-Portugal (POCTEP), en las gráficas de los informes facilitados a los ciudadanos que participan en los proyectos piloto de EnerUSER se establecen valores de referencia que permiten la interpretación de los datos", ha explicado
Romero sobre las ventajas que ha tenido esta iniciativa para quienes han participado en las experiencias piloto.
Desde el proyecto EnerUser se han desarrollado sistemas propios de monitorización de bajo coste con niveles de calidad equivalente a otros equipos comerciales. Recogen información en tiempo real y se transmite a una plataforma de recogida de datos en la que es posible hacer el seguimiento de los datos por cada vivienda individual y también de forma comparada entre viviendas. "Se pueden apreciar los valores en su línea histórica, valores medios y la comparación con el intervalo definido como condiciones de confort, y adicionalmente la plataforma permite visualizar las condiciones exteriores. A veces pensamos que los problemas de calidad de aire que afectan a las personas se deben a las condiciones exteriores, sin embargo el tiempo que pasamos en el interior de los edificios más del 80% hace que no debamos disociar la influencia entre calidad de aire interior y exterior", ha explicado el director técnico del ICCL.