Para nadie es un secreto que la pandemia cambió en gran medida el estilo de vida de todos, y la construcción de alojamientos no es una excepción. Las casas prefabricadas se han convertido en los alojamientos de moda tras la crisis sanitaria. De hecho, aunque por el momento este tipo de construcciones representan un mercado residual en España comparado con otros países europeos, pues solo representan el 1% sobre el total de casas construidas, según datos de la Plataforma de Edificación Passivhaus, la demanda de casas prefabricadas e industrializadas creció en 2021 de un 30% a un 60% debido a la aparición de la Covid-19.
Su auge se debe a las múltiples ventajas que presentan frente a los alojamientos tradicionales, como son su alta eficiencia energética, control y simplicidad en todo el proceso, acelerando los tiempos de entrega, la utilización de materiales naturales y sostenibles y la adaptación a todo tipo de lugares con una mínima instalación previa, implantando así un nuevo concepto de simplicidad y contacto con la naturaleza.
Con el objetivo de responder a esta tendencia y dar respuesta a la demanda actual de alojamientos sostenibles en la naturaleza como eco hoteles, hoteles rurales y glampings, nació Woodville, especializada en el diseño y la construcción de este tipo de alojamientos móviles, sostenibles, modulares y de madera, cuyo primer modelo recibe el nombre mohma, y para el que han contado con la gama de productos de contrachapado de
Garnica , empresa riojana líder mundial en la industria del contrachapado y pionera en gestión y uso de recursos naturales. El motivo es que
la gama de productos de contrachapado de Garnica cumple con todas las exigencias para este tipo de construcciones : durabilidad, aislante térmico y acústico, gran ligereza, facilidad de mecanizado (que se traduce en una reducción de tiempos y costes), tratamiento para uso exterior y, sobre todo, su sostenibilidad durante todo el proceso de fabricación y la utilización de materiales de origen europeo.
Estos alojamientos han sido diseñados por los arquitectos españoles Fernando Oiza y Patxi Mangado, fundador de Arquitectura y Sociedad, y de gran prestigio a nivel nacional e internacional. Se caracterizan por ser de fabricación industrializada y estar diseñados bajo los estándares passivhaus, con el fin de lograr la máxima eficiencia energética, pudiendo llegar a ser completamente autosuficientes. Con una capacidad máxima de 8 personas, mohma puede servir de alojamiento turístico en la naturaleza y habitual. Gracias a la ligereza de los materiales, estos son transportados en un camión para su posterior montaje e instalación, asegurando una alteración mínima en el terreno.
Echa un vistazo a los alojamientos prefabricados mohma y conoce cuáles son los materiales de madera de Garnica que se han utilizado para su fabricación a través de este enlace:
https://www.garnica.one/proyectos/woodwille.html