Los morteros autonivelantes o pastas niveladoras son productos que constituyen lo que se denomina «revestimientos continuos». Este término se define en la norma UNE-EN 13318 como «capa o capas de material para revestimientos continuos puestas en obra in situ, directamente sobre la base, adheridas o no, o sobre una capa intermedia o capa aislante con el fin de conseguir:
• Alcanzar un nivel determinado.
• Recibir el revestimiento final del suelo.
• Servir como suelo final.
Estos morteros especiales sustituyen a los morteros tradicionales en la confección de soleras, con importantes ventajas en prestaciones, homogeneidad, facilidad y rapidez de aplicación.
PUESTA EN OBRA Los morteros de nivelación de capa fina se utilizan normalmente adheridos directamente al soporte y los de capa gruesa pueden colocarse tanto adheridos al soporte como con capas de separación.
Soportes Antes de aplicar el producto es necesario realizar un reconocimiento y, en su caso, preparación del soporte sobre el que se va a realizar la aplicación.
El soporte debe ser estable y resistente para poder soportar los esfuerzos a que vaya a ser sometido, en caso necesario habrá que eliminar las partes excesivamente débiles.
Juntas Hay que respetar las juntas estructurales rellenándolas con un material adecuado o colocando juntas prefabricadas. Estas juntas deberán respetarse también en el revestimiento que se vaya a colocar sobre el mortero de nivelación.
En el caso de morteros autonivelantes de capa gruesa se debe colocar un rodapié perimetral de espuma de unos 8 mm de espesor para absorber las dilataciones y contracciones que se produzcan. La colocación de este se realiza mediante grapas o pegado con silicona a la pared.
Si existen tubos de calefacción deben protegerse con un forro de aislamiento. Si se desea incorporar aislamiento térmico, se colocará adaptándolo a las tuberías existentes. Si se sitúa aislamiento acústico se dispondrá con la precaución de que las uniones se solapen entre sí unos 10 cm.
Siempre hay que colocar plástico o papel kraft en toda la superficie sobre la que se vaya a verter el producto. Las juntas se sellarán con cinta adhesiva o calor. Se deben tomar los niveles de acabado de la solera para definir el espesor del producto a verter.
El correcto acabado de la obra depende fundamentalmente de que los niveles estén bien tomados y sean suficientes.
Planeidad En el caso de morteros de nivelación de capa fina, el soporte debe presentar una planeidad adecuada al producto con que se va a revestir. Si existen huecos o diferencias de nivel superiores al espesor máximo de utilización del producto, deberán corregirse rellenando los huecos o aplicando una capa de regulación de mortero.
Absorción Si la absorción es demasiado alta se pueden generar burbujas durante el vertido o un secado excesivamente rápido de la pasta.
Si la absorción es muy baja la adherencia puede ser insuficiente.
Para evitar estos casos conviene humedecer el soporte con una imprimación adecuada para regular una alta absorción o por un puente de adherencia, en caso de soportes no absorbentes.
Superficie El soporte deberá estar limpio de polvo, lechada, ceras, restos de colas, pinturas degradadas o cualquier otro material que impida una correcta adherencia del producto al soporte. Estos materiales se eliminan por aspirado, lavado, lijado, raspado, etc.
APLICACION La temperatura del soporte durante la aplicación deberá estar comprendida entre 5 y 35ºC, procurando evitar aplicar en zonas expuestas a la radiación directa del sol y a corrientes de aire.
Hay que amasar el producto con agua limpia en la proporción indicada por el fabricante hasta obtener una masa homogénea y sin grumos, utilizando un batidor de bajas revoluciones en el caso de productos de amasado manual. La consistencia deberá ser fluida, evitando el exceso de agua para no reducir la resistencia final del mortero.
Verter el producto en el suelo y extenderlo con ayuda de una llana, espátula u otra herramienta adecuada, cubriendo la superficie a revestir con el espesor de producto necesario para obtener la nivelación requerida.
En el caso de morteros autonivelantes de capa gruesa, después del vertido hay que batir el producto con una regla horizontal en dos direcciones perpendiculares entre sí para lograr el asentamiento de este y eliminar las burbujas que se hayan podido producir.
Es aconsejable hacerlo inmediatamente después del vertido y, en todo caso, antes de que el producto empiece a endurecer.
El espesor de producto deberá mantenerse entre los márgenes máximo y mínimo recomendados por el fabricante.
En caso de que el espesor necesario supere el máximo recomendable, será necesario realizar la aplicación en varias capas, esperando a que haya endurecido la capa base antes de aplicar la siguiente.
TRATAMIENTOS POSTERIORES El acabado de la solera autonivelante puede ser revestido y admite todo tipo de pavimentos (cerámica, parquet, moqueta, pintura, resinas, pvc, etc.).
Antes de la colocación de cualquier pavimento se deben realizar pruebas de humedad residual, resistencia superficial al rayado, resistencia al impacto y adherencia.
Deberán seguirse siempre las indicaciones del suministrador del pavimento